Gicovate tiene 84 años en el mercado. Desde 1931 fabrica sofá-camas y sillones transformables. “Cada vez buscamos agregarles más elementos. Este año, aparte del movimiento basculante o el de relax, agregamos masajeador. Y después va a salir la versión con bluetooth”, relató Pablo Cwik, propietario de Gicovate.
“El sillón viene equipado con parlantes y desde el teléfono celular se va a poder conectarlo para que luego en el sillón se pase música. Y cada vez vamos variando dentro de los sillones las distintas alternativas que se les pueden agregar”, agregó Cwik.
– Son programables y regulables en intensidad y en los distintos lugares donde se requieran masajes. Se puede programar o iniciar en un modo de prueba, que funciona de manera automática y va abordando las distintas zonas: cintura, espalda o piernas. Se vende con garantía de cinco años.
– Tiene cinco motores, que son los que hacen masajes en las distintas posiciones. Uno para la cabeza, uno para espalda, uno lumbar y dos para las piernas. Los motores son estadounidenses. Nosotros colocamos los motores en nuestros sillones y la gente puede elegir el color, el modelo, el diseño y el tapizado para ponerlo en su casa y que le combine con lo que tiene.
– Para la próxima exposición algunos sillones van a tener parlantes con bluetooth para que la gente pueda conectar el celular y escuchar música desde los costados de los sillones.
Para ver más imágenes sobre Gicovate, lea la nota aquí.
Fuente y fotos: D&F Muebles.
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